La amnistía a delincuentes planteada durante la campaña presidencial de Andrés Manuel López Obrador está en espera, dio a conocer el mandatario en la conferencia matutina desde Tepic.
Por ahora se avanza en estrategias de atención a las causas sociales de la violencia, como la desintegración familiar y la vulnerabilidad juvenil ante el consumo de drogas, especificó López Obrador.
La situación actual en Nayarit, dijo, demuestra que la clara división entre las autoridades y las fuerzas criminales es requisito para la paz.
En el pasado, los gobiernos nayaritas estuvieron intervenidos por el crimen organizado, recordó el presidente en referencia a Roberto Sandoval, exgobernador por el PRI acusado de nexos con el narcotráfico, y el entonces fiscal del estado, Édgar Veytia, quien en enero pasado se declaró culpable de trasegar drogas.
Además, la falta de profesionalismo en las fuerzas de seguridad del país dejó en vulnerabilidad a la sociedad mexicana, acusó.
El caso nayarita
La tasa de homicidios dolosos en Nayarit muestra una tendencia a la baja, detalló por su parte el titular de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval.
Además, 380 elementos de la Guardia Nacional y mil 73 agentes del Ejército y la Marina custodian la entidad del poniente de la república, agregó el mando militar.
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López Obrador estuvo acompañado durante la conferencia de prensa por Rafael Ojeda Durán, titular de la Marina; Luis Rodríguez Bucio, comandante a cargo de la Guardia Nacional; Alfonso Durazo, titular de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC); y Ricardo Peralta, subsecretario de gobierno de la Secretaría de Gobernación.
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