Aunque históricamente el sector empresarial ha acompañado a Acción Nacional, el reacomodo estratégico que perfila la Coparmex a nivel nacional parece dejar al blanquiazul sin uno de sus principales aliados políticos y electorales.
La Confederación Patronal de la República Mexicana compone una estrategia de formación de líderes conforme a sus intereses, que se llama «Alternativa por México».
Los líderes serán nombrados agentes ciudadanos de cambio y entre sus instructores se cuentan Alejanro Poiré, quien fue funcionario federal con Felipe Calderón; Jesús Silva-Herzog, politólogo y columnista de Reforma, y Miguel Ruiz Cabañas.
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Aunque aseguran que no es un partido político ni buscará aliarse con ninguno, la agrupación tiene una agenda de labores regionales parecida a la de los partidos políticos, con la mira en 22 estados de la república.
«Coparmex no tiene ni aspira a tener ninguna alianza electoral o de otro género con algún partido o asociación política», enfatiza la agrupación empresarial en un comunicado emitido tras la publicación del reportaje de Proceso al respecto.
Su objetivo, afirman, es formar líderes ciudadanos, con la participación de escuelas y centros de investigación, estudiantes, académicos, sindicalistas, activistas, emprendedores, comunicadores y también políticos.
Los ejes conceptuales son un «compromiso genuino» con la democracia liberal, el estado de derecho, la economía de mercado, la responsabilidad social y la globalidad.
Gustavo de Hoyos, presidente de la Coparmex, es un frontal opositor a Andrés Manuel López Obrador y ha participado en iniciativas contra proyectos prioritarios del gobierno del tabasqueño, como la construcción del aeropuerto de Santa Lucía.
De acuerdo con Álvaro Delgado, firmante del reportaje «La derecha empresarial alista su proyecto de nación» del semanario Proceso, entre los afines a la iniciativa se cuentan Claudio X. González, otro opositor a AMLO, y agrupaciones como Causa en común y México unido contra la delincuencia.
Crece la preocupación: la economía estancada por decisiones equívocas, la inseguridad peor que nunca, y evidentes amenazas a nuestra democracia liberal constitucional como lo demuestran, recientemente, la Ley de Extinción de Dominio, la Ley Garrote y la Ley Bonilla.
— Claudio X. González (@ClaudioXGG) August 3, 2019
Con la salida de Felipe Calderón y Margarita Zavala de las filas del blanquiazul; la pérdida de sus bastiones históricos Puebla y Baja California, y el deslinde de este grupo de la Coparmex, que promete no aliarse con nadie, el PAN enfrenta un panorama incierto y de seria pérdida de influencia.
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