Después de un arranque un poco accidentado, parece que ahora sí la política ambiental quedó en manos de una mente experimentada, crítica y profundamente comprometida con la 4T. Hace pocas semanas el doctor Víctor Manuel Toledo fue nombrado titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) —aunque al presidente le gusta decir encargados del despacho, recalcando su papel de servidores de la nación temporales que pueden ser suplidos en cualquier momento, como le pasó a su antecesora.
A Víctor, como nos atrevemos a decirle los que tenemos la fortuna de contar con su amistad hace muchos años —más de 30— se le viene encima una enorme y complicada tarea. Sinceramente, no me gustaría estar en sus zapatos, no sólo por la responsabilidad que implica llevar temas sumamente delicados y controvertidos, sino porque él lleva años de ser un sólido y consistente critico de las políticas ambientales y agroambientales erróneas y nunca había trabajado en el sector púbico.
Me imagino que para alguien que días antes de ser nombrado escribió sobre sus inquietudes por los megaproyectos —Tren Maya, refinería de Dos Bocas y el desarrollo del Corredor Transístmico— será muy complicado dar los dictámenes en materia de evaluación de impacto ambiental. ¿Cómo enfrentará las preocupaciones de cientos de comunidades indígenas que se verán afectadas positiva y negativamente con estos proyectos y que demandan la aplicación del artículo 169 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) sobre la consulta previa e informada de obras y actividades que trastoquen sus territorios originales?
Hay otros temas a los que tendrá que entrarle el flamante secretario. Hace pocos días circuló en las redes sociales su planteamiento sobre la política de conservación de los espacios naturales, en el cual coincidimos plenamente. Explicó que su enfoque será producir conservando y conservar produciendo, con plena participación de los dueños de la mayor riqueza natural de nuestro país, pueblos originarios y comunidades locales. No es ninguna sorpresa para nadie que este enfoque lo llevo empujando desde hace varias décadas y creo firmemente que el futuro de las áreas naturales protegidas de México estará sustentado en este nuevo paradigma de la sustentabilidad social del desarrollo rural.
En beneficio del nuevo secretario, puedo decir que él se preparó para esta tarea desde hace muchos años y acompañó al ahora presidente en sus esfuerzos por encabezar los destinos de la nación. Tiempo atrás, cuando junto a un grupo de científicos sociales y ambientales tuve la oportunidad de apoyar la precampaña de Marcelo Ebrard para presidente de México, Víctor encabezaba el proyecto verde de Andrés Manuel López Obrador. Cuando éste es elegido como candidato, nuestro grupo se sumó al proyecto ambiental que encabezaba Víctor. Ahora él tiene la oportunidad y la gran responsabilidad.
Todos nosotros estaremos deseosos de que le vaya muy bien, por él y sobre todo por el bien de nuestro querido país.
Pedro Álvarez Icaza. Experto en política ambiental
y en gestión y manejo de recursos de cooperación
multilateral internacional. Forma parte del programa
de líderes ambientales de El Colegio de México.
Instagram: @pedroalvarezicaza
