El alza en el precio de los combustibles en Ecuador provocó diversas movilizaciones en el país y ante esto, el gobierno de Lenín Moreno decidió decretar el Estado de excepción.
¿Qué implica está decisión?
Que se restringen algunas libertades y se permite a las autoridades tomar bienes públicos o privados para restablecer la normalidad de las actividades sociales.
Además de dotar de custodia adicional a las áreas estratégicas como refinerías, aeropuertos y plantas de generación.
El pasado martes, Moreno firmó un decreto para eliminar los subsidios al diesel y a la gasolina conocida como «extra», la de mayor consumo del país, con lo cual el precio estará ahora en función de los valores internacionales.
La gasolina «extra» pasó de 1.85 dólares a 2.30 dólares el galón, mientras que el diesel subió de 1.03 a 2.27 dólares el galón.
Los policías, con equipos antimotines, intentaron controlar las manifestaciones con una gran cantidad de gases lacrimógenos.
La situación se repitió con más o menos intensidad en ciudades como Guayaquil, Ibarra, Cuenca y Ambato, entre otras.