El Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha declinado la invitación del empresario Ricardo Salinas Pliego para una entrevista, argumentando que prefiere esperar a que el Poder Judicial resuelva el caso del millonario adeudo de impuestos del dueño de TV Azteca.
Durante la conferencia matutina, López Obrador destacó la importancia de esperar a que se resuelvan los asuntos pendientes en el ámbito judicial antes de entablar cualquier diálogo. «No puedo permitir que me entrevisten mientras hay un asunto en el Poder Judicial que tiene que ver con los impuestos», afirmó el mandatario.
El Presidente insistió en que es necesario mantener la calma y esperar a que se emita una resolución judicial antes de proceder con cualquier conversación. «No hay que exaltarse, tranquilos todos. Si este asunto ya está en el Poder Judicial, esperemos que el Poder Judicial resuelva y luego hablamos», subrayó.
A pesar de las preguntas insistentes de los reporteros, López Obrador reiteró su negativa a la entrevista, enfatizando que él y Ricardo Salinas Pliego tienen posturas y pensamientos distintos, lo cual no implica una enemistad, sino simplemente diferencias ideológicas. «No quiero ahora que esté por definirse lo de los juicios que tienen que ver con los impuestos, que se vaya a malinterpretar que tengamos una confrontación», señaló el Presidente.
Asimismo, López Obrador descartó la posibilidad de conceder entrevistas a medios nacionales, criticando la falta de profesionalismo y objetividad en la cobertura periodística de estos medios. «Están muy tendenciosos los medios de México, con honrosas excepciones, son medios de manipulación, no de información», afirmó el mandatario.
En cuanto al tema del adeudo millonario de impuestos de Ricardo Salinas Pliego, López Obrador expresó su descontento por la falta de cobertura mediática en TV Azteca. «No sale nada», comentó el presidente, sugiriendo que el medio de comunicación de Salinas Pliego evita abordar el tema de manera transparente.
La decisión de López Obrador de rechazar la entrevista y su crítica hacia los medios nacionales reflejan las tensiones políticas y mediáticas en México, así como la importancia que el presidente otorga a la resolución judicial de los asuntos pendientes antes de proceder con cualquier diálogo o interacción mediática.