Es increíble que alguien como Enrique Agustín Sampedro tenga foro dentro del Consejo Universitario de la UNAM. Alguien que niega la existencia del Pueblo palestino y del genocidio del que está siendo víctima actualmente no puede dirigir una universidad con vocación humanista.
Cómo puede salir este hombre a escupir odio y mentiras cuando de octubre de 2023 al día de hoy van 33,634 civiles palestinos asesinados de los cuales más de 13,000 son niños, al menos 134 periodistas y 174 trabajadores de la ONU y 685 personal médico, quienes sacrificaron sus vidas para preservar aquellas del Pueblo palestino, al cual este señor Sampedro, representante de la Facultad de Medicina, se niega a reconocer.
El pasado 21 de marzo, consejeros universitarios de la UNAM presentaron la propuesta de reconocer como genocidio lo que está viviendo el Pueblo palestino, sin embargo. Enrique Sampedro, con argumentos de lo más deleznables, negó la existencia de Palestina y del genocidio que están viviendo a manos de Israel.
Los discursos de odio y el intento de justificar el asesinato de niñas y niños inocentes para hacerlos pasar por terroristas es algo que la UNAM y el rector Leonardo Lomelí no deben permitir.
Fuera Sampedro de la UNAM.
