Las fake news y la derecha son inherentes, indivisibles, indisociables; no se puede pensar a la una sin la otra. Las fake news forman parte del código genético de la derecha, de sus líderes, de sus mecenas, de sus correligionarios, de sus académicos, de sus periodistas, de sus influencers; y por supuesto, de sus “organizaciones civiles”.
La elaboración, el consumo y la distribución de fake news no es exclusivo del caso mexicano; en la coyuntura por la que atravesamos podemos palpar este fenómeno en diferentes latitudes, ya sea: Sudamérica, Centroamérica, Medio Oriente, Europa del este y por su puesto en la “vanguardista” Europa occidental.
Antes de continuar, debo aclarar que el término fake news no debería emplearse puesto que al traducir este anglicismo el resultado que obtendremos sería el término noticias falsas. Y, es que, las noticias falsas no existen, en periodismo las noticias son o no lo son, y punto ¿Y entonces cómo debería llamarles a las fake news de manera correcta? la respuesta es: desinformación. Sin embargo, en la presente columna haremos uso de dicho anglicismo para fines prácticos ya que la influencia del vecino del norte trasmina como la humedad. Aclarado lo anterior, prosigamos…
En contra de AMLO
La desinformación, la creación de narrativas tendenciosas, la infamia y la desacreditación por parte de la derecha mexicana hacia el Presidente López Obrador no son nuevas ni nacieron en 2018 con aquella cantaleta de una supuesta pretensión de reelección por parte del mandatario; tampoco emergieron en 2012 cuando se le comparó con Hugo Chávez hasta el cansancio. Quizá sea en 2006 cuando se hizo patente la calumnia con la ya conocida e infame letanía “AMLO un peligro para México”. Sin obviar la parafernalia creada en torno al intento de desafuero…
Contra Claudia
Para Claudia Sheinbaum, presidenta electa, el escenario no luce nada distinto al que encaró Lopez Obrador. La derecha se encuentra enrabietada, dolida hasta el tuétano y se valdrá de sus artimañas más viles. Durante la campaña electoral del año en curso atestiguamos la clase de golpes bajos hacia Sheinbaum: que si era extranjera, que si era judía, que si era fría e insensible, que por qué se alació el cabello… en fin, un sin número de strikes.
El autoconsumo
Si bien la derecha es “experta” creando fake news, es pertinente también, dejar constancia del gusto, la predilección, la degustación y la debilidad de este sector por consumir sus propios desechos (cuasi orgánicos). y es que solo hay algo peor que ser mentiroso, y eso es creerte tus propias mentiras. Y para prueba de ello tenemos las encuestas patito que ellos mismos elaboraron, difundieron y se comieron.
Y así fue como saciaron su apetito deglutiendo a manos llenas platillos caducos tales como: Xóchitl el fenómeno, bendita Xóchitl… Virgen de Guadalupe, Xóchitl es Pueblo.
Sus medios, sus opinantes
Aunque el medio encabezado por Lord Montajes no es un ejemplo de periodismo serio y riguroso, existen casos peores como el de un canal de YouTube muy «atípico» en el cual, de plano, dejaron de lado todo periodismo militante y se volcaron de lleno a dar aquello que le fascina a la audiencia de derecha: el show… en el que se van a divertir.
El reto de Sheinbaum
La doctora hace bien en dar continuidad al ejercicio de rendición de cuentas al pueblo de México: Las Mañaneras. Será difícil en un principio, los malquerientes de López Obrador la querrán arrinconar al grado de intentar colocarla en contra de su antecesor; no obstante, se encontrarán con una mujer fuerte, inteligente, decidida, segura, capaz y con el arropo de 7 de cada 10 mexicanos.