Del viernes 22 al domingo 24 de octubre, el Presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, visitó la alta montaña de Guerrero, un rincón del país permanentemente olvidado por los gobiernos pasados, territorios sometidos a una lacerante pobreza y resistencia ante el autoritarismo político del viejo régimen. Es una región del estado suriano de históricos sentimientos e incubadora de movimientos sociales en defensa del territorio y la dignidad del Pueblo.
En sus entrañas la montaña alberga a los municipios más pobres, pero también a los maestros egresados de Ayotzinapa, a nuestros Pueblos originarios y al corredor guerrillero de Genero Vázquez Rojas entre múltiples luchas y heroicos Pueblos. Incluso en 1987 la montaña de Guerrero fue la sede del primer triunfo del Partido Comunista Mexicano en el municipio de Alcozauca con el profesor Othón Salazar Ramírez, por lo que se denomina desde ese entonces la montaña roja.
El Presidente, a lo largo de su lucha por la transformación del país, ha tenido una relación muy cercana y fraterna con los Pueblos de la montaña. Los ha recorrido todos más de una vez y en la campaña presidencial del 2006, decidió iniciar en Metlatónoc, el municipio más pobre del país, para reafirmar su compromiso que, por el bien todos, primero los y las pobres.
En esta gira de trabajo el Presidente se reunió con autoridades municipales y la gobernadora Evelyn Salgado Pineda, y expuso su voluntad manifiesta de seguir apoyando a la montaña. A nivel nacional, al menos uno de los programas del Bienestar llega a 7 de cada 10 hogares y en Guerrero tenemos un total de 1 millón 19 mil beneficiarios de los programas sociales que, en comparación con las 942 043 viviendas que tiene la entidad, reflejan que en promedio al menos 1 programa social llega a cada hogar guerrerense. Pero la voluntad de cumplir con la deuda histórica con los Pueblos de la montaña es evidente al tener más beneficiaros. Por ejemplo, en Metlatónoc, son 3 890 viviendas y se tiene un total de 10 553 beneficiarios; asimismo, Cochoapa el Grande. que cuenta con 4 166 viviendas, tiene un total de 8 861 beneficiaros de Gobierno de México. Es decir, en la montaña de Guerrero en promedio llegan por vivienda dos programas sociales de Gobierno de México.
La finalidad de priorizar estos territorios es, antes que nada, hacer justicia social y después combatir la violencia al atender las desigualdades que la provocan. Bajo la premisa del Presidente “arriba lo los abajo”, la montaña de guerrero recibe los programas de las becas Benito Juárez, Sembrando Vida, tiene cinco Universidades para el Bienestar Benito Juárez, Pensión de Adultos Mayores a partir de los 65 años, niños y niñas con discapacidad, el único estado con fertilizante gratuito y universal, Jóvenes Construyendo el Futuro, la Escuela es Nuestra y Tandas para el Bienestar, principalmente.
De igual forma, el Presidente anunció la ampliación de todos los programas, en particular Sembrando Vida, para los 85 municipios. Asimismo, informó sobre la construcción de sucursales del Banco del Bienestar para todos los municipios de la región e incluso dos donde las exigencias del territorio así lo necesiten. También comunicó la construcción de los caminos rurales desde la base comunitaria, como ya sucede en el estado vecino de Oaxaca. De igual forma anunció la creación de 15 cuarteles de la Guardia Nacional antes del 2023 como parte de la estrategia para serenar los territorios azotados por la violencia.
En consecuencia, no es para nada extraño el cariño y respaldo que tiene el Presidente en el estado y especialmente en la montaña de Guerrero. “Amor con amor se paga”, fue lo que presenciamos durante la gira en la que los Pueblos hicieron entre trayecto y trayecto un poco más de 80 retenes para saludar del mandatario y ofrecerle con mucho cariño los productos de la región y las cosechas del programa Sembrado Vida. Lo que crispa la piel es que, a pesar tener el huracán Rick categoría II pasando por encima de Guerrero, los Pueblos bajo la lluvia esperaron a López Obrador para entregarle miel, pan, calabaza, elotes, café, tamales, plátanos y barbacoa de chivo, entre mucho más. Con pancartas, poemas, flores de cempasúchil, vivas y música de viento, se vivió la caravana presidencial de fraternidad en nuestros pueblos.
En Guerrero por la transformación nuestros Pueblos con fraternidad ofrecen el corazón.