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Las niñas pueden ser lo que quieran ser.

El fin de semana en la gira de la Presidenta al interior de la República, específicamente en la visita de la mandataria a San Luis Potosí surgió una conmovedora dinámica en donde robó cámara una niña de tres años llamada Zoé que saludaba efusivamente a la Doctora Sheinbaum y terminó hablando frente al micrófono en el acto protocolario, por supuesto se llevó los aplausos; eso no sucedía antes del humanismo mexicano.

Desde que tenemos la primera presidenta de la historia mexicana contamos con la fortuna de ser testigos de actos muy conmovedores, la frase llegamos todas definitivamente es una realidad. En otros tiempos, era imposible que alguien pudiese interrumpir un acto protocolario presidencial y ahora es la mismísima Ejecutiva Federal quien cede la voz a una pequeña niña. No me parece cosa menor porque soy una fiel creyente de que para gobernar mejor hay que poner por delante el corazón como nos demostró el Presidente Andrés Manuel López Obrador.

Definitivamente la vida pública cambió desde 2018, ahora es otra más humana y con una mujer al frente, es más sensible.

Hace algunos años a las niñas se les decía que debían casarse, tener bebés, encargarse de la casa —sin remuneración económica, por supuesto—, que ¿para qué estudiaban? entre otros planteamientos lamentables, ya que no son más que estereotipos que dañan a las infancias y a las personas.

El paradigma cambió y esperamos que jamás se retroceda, porque después de 71 años que nuestras heroínas sufragistas obtuvieron para todas el derecho al voto femenino en nuestro país vemos enormes avances en materia de género, de paridad sustantiva y de derechos de las mujeres.

Ahora les decimos a las niñas:

Ustedes pueden ser lo que quieran ser, futbolistas, presidentas, maestras, diputadas, gobernadoras, científicas, amas de casa, lo que ellas quieran, ellas deciden sobre su vida y sobre su futuro. Aquí estamos para apoyarlas e impulsarlas.

Además, es importante mencionar que con el programa social que nuestra Presidenta elevará a grado constitucional Mi Beca Para Empezar beneficiará y transformará por completo la vida de las infancias, ahora contarán con el derecho a la educación pública, gratuita y de calidad, sin estar en desventaja.

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