El 20 de octubre del 2021 se conmemoró el 98 aniversario de la creación de las Misiones Culturales. A 2 años de su centenario, es importante recordar que durante años han sido olvidadas por las autoridades educativas estatales y federales, motivando que algunos centros de trabajo cuenten con solo 4 maestros especialistas (de los 12 que deberían ser por servicio educativo), lo que demuestra la clara intención de no permitir el crecimiento de estos servicios. En Guerrero, los trabajadores de las Misiones Culturales realizaron diferentes actividades de difusión, apoyando como siempre a las comunidades rurales sin escatimar esfuerzos en beneficio de sus ciudadanos.
Con la creación de la Secretaría de Educación Pública en 1921, se implementaron los servicios educativos en esta modalidad para beneficiar a la población con capacitación para el trabajo. Las Misiones Culturales impulsan el Sistema Educativo Nacional y la transformación económica, política y cultural de las comunidades rurales y suburbanas, lo que contribuye al desarrollo del país, mediante la capacitación que brindan los especialistas en el campo formativo productivo, la alfabetización y la educación básica. Desde aquí se desprende la gran visión de José Vasconcelos, quien creó este proyecto para el mejoramiento de la educación de las comunidades el 20 de octubre de 1923.
Hoy en día, el Gobierno Federal —que encabeza Andrés Manuel López Obrador— el Gobierno Estatal, el Magisterio Nacional y la misma sociedad se han propuesto transformar el sistema educativo con el propósito de asegurar para los jóvenes y adultos, una educación que los impulse como ciudadanos de una comunidad y que posean los conocimientos y capacidades para elevar la productividad nacional, los niveles culturales, sociales y económicos de los pueblos rurales y suburbanos marginados —es decir, con una población que fluctúe entre 1500 y 5000 habitantes—. Cabe recordar que un paso trascendente para la educación popular se dio durante la presidencia del Gral. Álvaro Obregón, siendo el Lic. José Vasconcelos Calderón —oaxaqueño ilustre— el autor del proyecto que concretó la creación de la Secretaría de Educación Pública el 3 de octubre de 1921. Al ser nombrado titular de esta, le imprimió a su obra un alto sentido social, difundió la cultura y combatió el analfabetismo. En diciembre del mismo año, nació la escuela rural mexicana, cuyo lema es “Enseñar a vivir antes que a leer y a escribir”. Inicialmente, el Plan de Misiones Culturales estaba encaminado a lograr el mejoramiento cultural profesional de los maestros en servicio, de las prácticas domésticas de la familia, de la economía de la comunidad y del saneamiento de los poblados. En 1927, se crearon las Escuelas Normales Rurales y se adscribieron a la Dirección General de Misiones Culturales, por lo que se puede afirmar que estas constituyen el antecedente directo de las Escuelas Normales Rurales. A partir de 1942, cuando la primera tarea mencionada pasó a ser responsabilidad de las Normales y a las Misiones, se les encomendó: mejorar la economía de las familias campesinas, elevar la salud, la educación, la cultura y la recreación. A los profesores de enseñanza rural, se les ayudaba proporcionándoles los conocimientos necesarios en relación con la zona y las necesidades de la comunidad. Más tarde, las Misiones Culturales se convirtieron en el instrumento educativo para mejorar la condición física, intelectual y moral de la comunidad donde se llevaban a cabo, a través de la instalación de sus talleres; sus actividades implicaban muchas áreas de la actividad humana y, en consecuencia, requerían de los esfuerzos colectivos de un equipo de especialistas reunidos en Misión Cultural.
Hoy en día, las Misiones Culturales tienen la encomienda de impartir alfabetización, primaria y secundaria a personas mayores de 15 años, la atención del Programa 10 – 14 y la capacitación para el trabajo productivo en artes y oficios, en proyectos de mejoramiento de la vivienda, saneamiento ambiental, salud pública, desarrollo agropecuario y obras materiales, entre otros. Las Misiones son de gente educada y de capacitación, con vida propia que, como todo ser vivo, nacieron, crecieron y se multiplicaron, algunas veces enfermaron; tuvieron días, meses, años de extrema gravedad, hubo quienes las daban por muertas y apostaron por desaparecerlas. Felizmente aquí están, vivas y activas. Las Misiones Culturales son un Modelo Educativo Mexicano, mismo que merece subsistir por lo que requieren de todo el apoyo para que puedan desarrollarse plenamente a la realidad de un mundo cambiante y dinámico de nuestros días. En Guerrero, siguen prevaleciendo los 12 servicios educativos distribuidos en las diferentes regiones y municipios con que cuenta la entidad, pero con una significativa baja de personal, lo que repercute en tener las 12 Misiones incompletas por falta de maestros especialistas, Jefes de Misión y Supervisión que se han jubilado, fallecido y otras incidencias que actualmente la Secretaría de Educación no ha cubierto. Sin embargo, la 4T ha llegado también al estado suriano, y al frente de la SEG está un hombre que tiene compromiso con los principios de la Cuarta Transformación —de no mentir, no robar y no traicionar al Pueblo— y en él depositan su confianza los trabajadores de este servicio que hasta la fecha siguen resistiendo.
En el Plan Sectorial de este año se contemplaron los recursos faltantes y la creación de nuevos servicios para dar cobertura a las comunidades demandantes. Por lo cual solicitamos la atención a estos servicios de Misiones Culturales olvidados por el Estado y la Federación.
- 59 claves faltantes, entre ellas, 9 de jefes de Misión, 1 de Supervisor y el resto de especialistas; mismas que no se han cubierto a partir de 2010 a la fecha y por diferentes incidencias.
- Falta de otorgamiento de equipos y herramientas acordes a la actualidad para dar un mejor servicio a las comunidades demandantes del servicio.
- Etiquetar el presupuesto asignado a Misiones Culturales ya que se han desviado estos recursos.
- Asimismo, se considere al personal en las diferentes etapas de promoción del UESICAMM, ya que anteriormente se participaba en Carrera Magisterial y al cambiarle de nombre se ha excluido a los trabajadores de los procesos de participación.
Larga vida a las Misiones Culturales.