El viernes 3 de enero de 2025, el Instituto de Movilidad y Accesibilidad de Nuevo León aprobó un aumento progresivo en la tarifa de los camiones, que son el principal medio de transporte público en los municipios que conforman la zona Metropolitana de Monterrey.
Con esta medida, el costo del pasaje llegará hasta los 17 pesos, aumentando considerablemente los 12 pesos o 13 pesos que se pagan hoy en día. Esto es un duro golpe a la economía familiar, golpe que se decide justo en el momento álgido de la «cuesta de enero”.
A la falta de un sistema de transporte integral para la Zona Metropolitana de Monterrey; las largas filas para esperar los camiones —que en promedio tardan una hora—; el hecho que cada usuario tiene que tomar dos o tres camiones para llegar a su destino (de 12 o 13 pesos por camión), entre ellos cientos de miles de trabajadores y estudiantes, y la ausencia de rutas en múltiples zonas que yacen totalmente incomunicadas del transporte público se añade este aumento que afecta directamente al Pueblo de Nuevo León.
El gobierno del MC, o «PAN naranja», ha asestado este golpe bajo al Pueblo, a pesar de las voces mayoritarias en contra de esta maniobra. En el seno del Instituto de Movilidad y Accesibilidad, dependencia encargada de fijar las tarifas, solo los alcaldes morenistas de Escobedo y Santa Catarina se opusieron a la medida.
La zona metropolitana de Monterrey es la segunda más poblada del país y la segunda en extensión territorial con aproximadamente 5,322,117 habitantes, en ella habita el 96% de la población de Nuevo León, sin embargo, solo cuenta con tres líneas de Metro (Metrorrey), derivado del abandono transexenal de la infraestructura de movilidad de los gobiernos del PAN, PRI, e “Independiente”, que se olvidaron de las necesidades de la gente y se dedicaron a saquear el erario. Por ello no hay transporte público económico, seguro y limpio.
Los usuarios de los camiones en Monterrey se enfrentan también cotidianamente a que las unidades del gobierno estatal cobran 15 pesos, mientras que el Metrorrey cuesta 8.50 pesos. Los tiempos de traslado son en promedio de 2 horas 21 minutos en viaje redondo (plataforma Cómo Vamos Nuevo León). No hay políticas públicas de movilidad para apoyar a adultos mayores, personas con discapacidad y estudiantes.
Además, para los sectores de la población que por diversas razones tienen que transportarse en taxi, se definió un aumento de casi el 300% para este medio en 2025. El “banderazo” del taxi se incrementó de los 8.78 a los 35 pesos para vehículos que utilizan gasolina tradicional, mientras que para los taxis que operan con energías limpias y emplean aplicaciones móviles tendrán un aumento en el banderazo de 8.78 a 38.50 pesos. El costo por kilómetro recorrido subió a 5.22 pesos por cada mil metros. Lo anterior significa un aumento del 298% en la tarifa inicial de los taxis convencionales.
Este golpe seco al Pueblo, que se conoce como “el tarifazo”, implica una franca medida antipopular, a contracorriente de las transformaciones que vive el país; aunque el aumento está disfrazado como “gradual” se estima que en los hechos podría generar abusos en el corto plazo, y llegar a cobrarse hasta los 20 pesos por abordar un camión urbano en 2026. La decisión no consideró otras alternativas como el subsidio, la diversificación de los esquemas de movilidad, la austeridad en otras áreas del gobierno local, o un verdadero sistema integral de movilidad.
Ante esta complicada realidad es ya un clamor en Nuevo León, que solo la Transformación —impulsada por Morena a través de la regeneración nacional del Estado de Bienestar con enfoque de derechos sociales, y de los programas que se impulsan a favor de la economía familiar—, como la única alternativa política que efectivamente se preocupa por los sentimientos y necesidades del Pueblo regio.