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Obstáculos para la paz

Article 370 es una película india disponible en la plataforma Netflix que se centra en la región de Cachemira.[1] El filme muestra una compleja realidad política y social, así como los esfuerzos del gobierno indio que logró en 2019 cambiar de raíz la dinámica de violencia derivada de conflictos religiosos, étnicos y económicos dentro del marco constitucional vigente, sin afectar la vida de personas inocentes.

El panorama que enfrentaba la población de Cachemira previo a la derogación del artículo 370 —la legislación que otorgaba autonomía especial a esta apartada región de la India— nos permite entender que el origen de la violencia en el territorio era la extensa red de intereses económicos internacionales que se benefician del conflicto.[2] Las élites económicas y partidos políticos locales, los gobiernos de Pakistán y China, así como múltiples Organizaciones No Gubernamentales —representantes de los intereses de los EE. UU. y la Unión Europea— lucraron con los recursos canalizados a la región destinados a recuperar la paz. Por esto mismo perpetuaron conflictos locales y boicotearon acciones del gobierno para estabilizar a la provincia autónoma.[3]

Cualquier espectador mexicano puede hacer la conexión de la trama con nuestra realidad cotidiana, ya que, tanto en México como en la India, si algo ha puesto en peligro la vida institucional y democrática es la delincuencia global organizada, su penetración territorial e institucional y las manifestaciones de violencia, que han deteriorado la convivencia pacífica, y limitando el ejercicio de libertades ciudadanas.[4]

La narrativa de Bollywood[5] muestra la determinación, resiliencia y dedicación con la que funcionarios públicos y agentes de inteligencia enfrentaron la resistencia interna evitando caer en provocaciones para contener una opinión pública internacional adversa. Lo anterior permite imaginar que en México es posible defender la democracia y fortalecer al Estado —respetando los derechos humanos— en aquellas regiones azotadas por la violencia, ya que al igual que nuestros hermanos de la India, compartimos un panorama en el que organizaciones civiles locales —legítimas o delincuenciales— ligadas a intereses económicos internacionales, son el mayor obstáculo para alcanzar la paz.[6]

Sin embargo, esta maraña de intereses es muy intrincada. Para revelarla se requiere de labores de inteligencia que permitan identificar a los actores globales de la delincuencia organizada que operan en nuestro país, así como mapear en dónde y de qué forma se manifiestan sus agentes locales en nuestro territorio.[7] Por eso es muy alentador saber de la creación de la Subsecretaría de Inteligencia e Investigación Policial dentro de la SSPC, la cual contará con analistas, investigadores de campo, investigadores de gabinete, especialistas técnicos y herramientas tecnológicas para identificar redes criminales y así atacar desde sus orígenes la violencia en México.[8]

El mayor reto para desarticular redes tan arraigadas en el tejido social es intervenir de forma efectiva el territorio, asunto que aborda con espectacular dramatismo Article 370, ya que una de las consignas era operar sin que hubiera bajas civiles, al tiempo que muchos jóvenes eran reclutados por grupos criminales para impedir la acción de la justicia. Habilitados por la Agencia Nacional de Investigación, el brazo del gobierno central con capacidad operativa en toda la India, lograron infiltrar y neutralizar a los grupos locales más radicales sin necesidad de que corriera sangre de personas inocentes. Por esto albergamos grandes esperanzas en una Guardia Nacional, reforzada con las capacidades de investigación e inteligencia que le otorga la reciente reforma constitucional, que logre reducir la incidencia delictiva a nivel nacional.

Consolidar los cambios que estas decisiones tan monumentales conllevan, requieren de una férrea voluntad política que acompañe las acciones de inteligencia y las operaciones de campo. Con el fin de disipar las tensiones separatistas y consolidar una sola India, sus líderes políticos se propusieron actuar dentro de la legalidad, con secrecía y sin caer en las provocaciones de los grupos separatistas sedientos de sangre, alcanzando el respaldo parlamentario necesario para revocar el artículo 370. Para 2022 Cachemira había recuperado el flujo de turismo que tuvo antes de la Partición[9] y hoy continúa prosperando en armonía.

Por nuestro lado, las autoridades mexicanas se pronunciaron por una Estrategia Nacional de Seguridad para garantizar la paz y fortalecer la presencia del Estado en todo el territorio.[10]  La disminución de la incidencia delictiva;[11] la neutralización de los generadores de violencia y de redes criminales, así como el fortalecimiento de las capacidades de prevención y proximidad social de las policías locales, son los compromisos que hicieron con la sociedad que les otorgó el mandato en las urnas, y cuyo cumplimento será una medida del éxito de nuestro proyecto de nación.


[1] Watch Article 370 | Netflix

[2] Las organizaciones delictivas internacionales más poderosas las conforman; contrabandistas —de armas, órganos humanos, estupefacientes, maderas finas, medicinas y mercancías de lujo falsificadas—, traficantes de personas —migrantes, trata, infantes— y los grupos paramilitares que financian las potencias globales para garantizarles el acceso y control de los recursos naturales estratégicos, —desde el agua y el petróleo, hasta el litio y otras tierras raras—.

[3] La referencia obligada en México es el Centro Prodh que recibe fondos de la OSF de George Soros, la OEA, HRW, Amnistía Internacional y el WWF. Cualquier similitud con lucrar con los conflictos y perpetuarlos, como en Cachemira, no es coincidencia, ya que son las mismas organizaciones aquí y allá, con excepción de la OEA, responsable del golpe de Estado en Bolivia de 2019.

[4] La vida cotidiana en zonas con altos índices de violencia afectan la libertad de movimiento y representan constantes amenazas a la integridad de las personas.

[5] La industria del cine Indio, sobre sus características y contraste con el cine nortemericano escribí en: Bollywood tiene ‘otros datos’ – El Soberano

[6] Grandes empresarios de la región, como los comerciantes de productos agrícolas con vínculos con  Pakistán, aliadas con políticos separatistas locales, son unos ejemplos de estas organizaciones locales que impedían estabilizar Cachemira, un hecho que sirve para refutar la obsesión de los panistas en México de querer catalogar  como “narcoterrorista” a todo quien participa en cualquier actividad ilícita.

[7]Comercio informal de productos pirata, extorsión, robo de mercancías, asalto a casa habitación, robo en vía pública, desplazamientos forzados, narcomenudeo y, por supuesto, secuestros, homicidios y feminicidios.

[8] Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana.

[9] Qué fue la Partición de la India y por qué sigue siendo un problema en la región | National Geographic

[10] Presidenta Claudia Sheinbaum presenta Estrategia Nacional de Seguridad

[11] Principalmente de los homicidios dolosos y de la extorsión.

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