Mientras la 4T sigue su camino y el Pueblo de México le da su confianza, la oposición sigue sin entender lo que pasó el pasado 2 de junio.
Ni las heridas han sabido lamerse, continúan con ataques similares a los que realizaron en los últimos 6 años y que las elecciones pasadas demostraron su poca eficacia. Pero es que tenemos una oposición sin reacción, con poca imaginación como cuando fueron gobierno, administraciones que poco o nada hicieron durante 40 años para cambiar la inercia empobrecedora y corrupta que vivía México, poco saben hacer ahora que son oposición.
Han pasado dos meses ya desde su escandalosa derrota y no se adaptan a la nueva realidad, una realidad que les dice que ya el Pueblo busca representantes que muestren empatía, adaptación y autocrítica para saber cambiar de rumbo cuando las cosas van mal, representantes que escuchen al Pueblo y no que en su soberbia continúen haciendo lo mismo sin importar si las medidas empobrecen a la gente.
Las filas son interminables de gente que se anota a los nuevos programas sociales encaminados a apoyar al pueblo con dinero del pueblo, dinero mexicano muy lejos ya, de las arcas de paraísos fiscales que era donde iban a parar antes, a cuentas individuales de malandrines traidores a México.
Por eso la oposición poco o nada podrá hacer cuando se realice la reforma al poder judicial que el Pueblo está esperando para que la justicia en México vaya acorde con los nuevos tiempos, en los que primero está el Pueblo y no unos cuantos privilegiados como antes.
Y a los extraterrestres, primero investiguen, después opinan.