Luego de la destitución del Presidente de Perú, Pedro Castillo, grupos de la derecha peruana se concentraron en los alrededores de la Embajada de México para impedir que el mandatario busque refugio y asilo en suelo nacional mexicano.
Y es que las élites peruanas no dejaron de hostigar al gobierno popular encabezado por Pedro Castillo, quien fue elegido democráticamente. Además, los conservadores de aquel país bloquearon las vías de comunicación con la Embajada mexicana.
El canciller mexicano, Marcelo Ebrard, afirmó que México está dispuesto a ofrecer asilo a Pedro Castillo, actualmente detenido en Lima después de ser destituido por el Congreso, aunque apuntó que por el momento no lo ha solicitado.
El Secretario de Relaciones Exteriores mostró su preocupación por la situación en Perú y agregó que el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, le ha pedido que lo mantenga informado en todo momento.
