La Presidenta Claudia Sheinbaum ha destacado la importancia de estas mesas de trabajo, subrayando que serán fundamentales para alcanzar consensos y definir las condiciones necesarias para implementar esta reforma de manera gradual. «Este es un paso crucial para el futuro de nuestro país, un legado que dejaremos a las futuras generaciones», afirmó.
Este anuncio llega tras años de aplazamientos y discusiones sobre la reforma laboral, y se enmarca dentro del Segundo Piso de la Transformación que busca consolidar un México más justo y equitativo.La reducción de la jornada laboral no solo mejorará la calidad de vida de los trabajadores, sino que también impulsará la productividad y el desarrollo económico del país.
La jornada laboral en México no se ha reducido desde 1917, cuando se estableció la jornada de 8 horas diarias en la Constitución. Durante el periodo neoliberal, que comenzó en la década de 1980, la clase trabajadora en México enfrentó un deterioro en sus condiciones laborales. Como expone Karen Estrada, en su artículo «El mundo del Trabajo en México en un contexto neoliberal», la tasa de desocupación disminuyó de 7.5% en 1973 a 3.6% en 2017, pero predominaban los trabajos eventuales y el salario mínimo decreció casi un 30% entre 1940 y 2018.
La relevancia de esta reducción radica en su potencial para construir transformando la vida de millones de mexicanos, brindándoles más tiempo para su familia, educación y recreación. Esta reforma no solo es un paso hacia la justicia laboral, sino también un pilar fundamental para el Segundo Piso de la Transformación.