Claudia Sheinbaum Pardo escribió un capítulo histórico en la vida de México este 15 de septiembre al convertirse en la primera mujer Presidenta en dar el Grito de Independencia desde el balcón central de Palacio Nacional, en un Zócalo abarrotado por miles de mexicanas y mexicanos que celebraron el 215 aniversario del “Grito de Dolores”.

La Mandataria, de 63 años, encabezó la ceremonia acompañada de su esposo Jesús María Tarriba, y destacó un mensaje incluyente y lleno de justicia histórica. Durante su intervención, Sheinbaum honró a los héroes tradicionales de la Independencia, pero también rindió homenaje a las heroínas anónimas, a las mujeres indígenas y a las mexicanas y mexicanos migrantes, visibilizando a quienes a menudo han sido olvidados en los libros de historia.
“Mexicanas, mexicanos. Viva la independencia, viva Miguel Hidalgo y Costilla, viva Josefa Ortiz Téllez Girón, viva José María Morelos y Pavón, viva Leona Vicario, viva Ignacio Allende, viva Gertrudis Bocanegra, viva Vicente Guerrero, viva Manuela Moilna, ‘la Capitana’.
Viva las heroínas anónimas, viva las heroínas y héroes que nos dieron patria. Viva nuestras hermanas y hermanos migrantes, viva la dignidad del pueblo de México, viva la libertad, viva la igualdad, viva la democracia, viva la justicia, viva México libre, independiente y soberano. ¡Viva México, viva México, viva México!”, proclamó Sheinbaum ante la multitud.
Previo al histórico Grito, la presidenta realizó una guardia de honor frente al retrato de Leona Vicario, la “Benemérita y Dulcísima Madre de la Patria”, reafirmando el compromiso de su gobierno con la memoria histórica y la justicia social.
Con este acto, Sheinbaum no solo hizo historia como la primera mujer en comandar la ceremonia más simbólica de México, sino que también envió un mensaje poderoso: la Cuarta Transformación reconoce y celebra a todas las mexicanas y mexicanos que construyen patria, visibilizando la importancia de la igualdad, la justicia y la dignidad de todos los sectores de la sociedad.




