En una acción que promete reforzar la justicia fiscal en el país, el Senado de la República aprobó la reforma constitucional a la Ley de Amparo promovida por la Presidenta Claudia Sheinbaum. La medida prohíbe a los jueces conceder suspensiones provisionales o definitivas para detener la aplicación de leyes que se reclamen como inconstitucionales.

Con esta reforma, se busca eliminar un recurso legal que, en los últimos años, fue utilizado de manera recurrente por grandes corporaciones y figuras empresariales, entre ellas Ricardo Salinas Pliego, para retrasar o incluso evadir el pago de adeudos fiscales. Estas suspensiones permitían impugnar la constitucionalidad de las leyes que sustentan dichos adeudos, generando dilaciones que afectaban la recaudación y el cumplimiento de la ley.

La Presidenta Claudia Sheinbaum destacó que esta reforma fortalece la justicia y la equidad en México, asegurando que nadie pueda utilizar vacíos legales para evitar cumplir con sus obligaciones fiscales. «Se trata de un paso decisivo para garantizar que las leyes se apliquen de manera efectiva y que la justicia no tenga excepciones para los poderosos”, afirmó.

Diversos legisladores de Morena y aliados celebraron la medida como un avance histórico en la lucha contra la impunidad y en defensa del interés público, mientras que críticos argumentan que podría concentrar demasiado poder en la aplicación de la ley. Sin embargo, el consenso en el Senado fue mayoritario, reflejando la prioridad de la 4T por garantizar que los recursos públicos se gestionan de manera transparente y justa.

Con esta reforma, el gobierno federal refuerza su compromiso de combatir prácticas que, hasta ahora, permitían a ciertos actores económicos evadir responsabilidades, consolidando un sistema más justo para todas y todos los mexicanos.