El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, declaró públicamente que su país mantiene una guerra comercial con China, al considerar que los aranceles son una herramienta clave para la defensa y la seguridad nacional.
Durante una conferencia de prensa en la Oficina Oval de la Casa Blanca, el mandatario fue cuestionado sobre una posible reunión con el presidente chino Xi Jinping en las próximas semanas y si un fracaso en las negociaciones implicaría una guerra de tarifas.
“Ya estamos en una. Si no tuviéramos tarifas, estaríamos expuestos, seríamos nada. No tendríamos defensa. Las tarifas son una herramienta muy importante para nuestra defensa y seguridad nacional. Si no tenemos tarifas, no tendremos seguridad nacional”, afirmó Trump.
El presidente estadounidense reiteró que los aranceles seguirán siendo parte central de su política económica, al asegurar que sin ellos el país perdería competitividad frente a China.
Estas declaraciones refuerzan la postura proteccionista de su administración y anticipan nuevas tensiones en la relación bilateral entre las dos mayores economías del mundo, en un contexto marcado por desacuerdos comerciales, tecnológicos y diplomáticos.