Circula en redes que una facción del mal llamado “movimiento Gen Z” planea saquear Elektra y Banco Azteca, las mismas tiendas de Salinas Pliego, quien comenzó impulsando la marcha. La ironía no podría ser más clara: lo que la derecha presenta como “rebeldía juvenil” termina apuntando a sus propios aliados.
Los verdaderos jóvenes no saquean, se organizan. No defienden empresarios ni intereses corruptos: luchan por educación, justicia y un futuro digno. Este montaje mediático pretende vender una juventud apática y violenta, cuando en realidad la generación joven de México está más despierta que nunca y no se deja engañar por quienes usan máscaras de “revolucionarios” para defender los privilegios de siempre.



