La mañana de este 22 de junio, el Presidente López Obrador abordó la “tardanza” con la que las fiscalías, y el Poder Judicial en general, han ido procesando casos emblemáticos, como el desafuero del todavía gobernador de Tamaulipas, Francisco García Cabeza de Vaca. Reconoció que el conservadurismo y la corrupción han cooptado al Poder Judicial, donde hay que tener “a raya” a los jueces, tarea que le ha quedado grande al Consejo de la Judicatura.
“Sí hay jueces buenos y magistrados y ministros, pero estos jueces corruptos, que los hay, hay que tenerlos a raya y buscar que funcione el Consejo de la Judicatura, que con todo mi cariño para ellos, porque hay gente ahí que estimo mucho, el Consejo de la Judicatura no ha estado a la altura de las circunstancias”, aseguró el Presidente.
No obstante, destacó la rectitud del Ministro Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Arturo Zaldívar, y del Fiscal General Alejandro Gertz Manero, a quienes declaró tenerles toda la confianza. En el caso concreto de Zaldívar, el mandatario aseguró que le consta su constante lucha contra la corrupción “pero están muy arraigados esos vicios”, declaró. Asimismo, subrayó que estos contubernios entre las autoridades y la delincuencia no son nuevos, sino que vienen desde mucho tiempo atrás.
El Presidente no descartó tomar cartas en el asunto a través de una reforma constitucional y de esta forma finalmente comenzar la Cuarta transformación del Poder Judicial, aunque recordó que la alianza opositora no quiere hacer su trabajo y discutir las futuras reformas trascendentes que presente el Ejecutivo Federal.
