Ciudad de México a 10 noviembre, 2025, 10: 14 hora del centro.
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Que el cielo bendiga Chihuahua

Desde la época en la que el duartismo se apropió casi totalmente de todo poder e institución pública en Chihuahua, es recordada y ahora utilizada comúnmente, hasta como chiste, la frase: “Que el cielo bendiga a Chihuahua” con la que César Duarte acostumbraba cerrar sus discursos y participaciones ante los grandes auditorios que otrora aplaudían todas sus tropelías.

Tal vez este mantra formaba parte de su delirio de grandeza, creyéndose algún tipo de divinidad o, quizá, era un cargo de consciencia implorando que fuerzas sobrenaturales protegieran al estado que él junto a su banda de ladrones saqueaban día a día. 

El duartismo y en especial el ex-gobernador César Duarte se hicieron de riquezas inexplicables -o más bien muy explicables- al acumular propiedades, residencias y vehículos de lujo, ranchos, ganado, su propio banco. Incluso la frase “Que el cielo bendiga a Chihuahua” terminó siendo propiedad de este corrupto cuando la registró  el 6 de octubre de 2013 ante el Instituto Mexicano de la Propiedad intelectual. Todo esto a costa del robo continuo y a gran escala del patrimonio de los chihuahuenses. 

Este pasado oscuro es bastante reciente. Recordemos que César Duarte gobernó de 2010 a octubre de 2016, creando un instinto de desconfianza del pueblo de Chihuahua respecto a las autoridades municipales, estatales y federales. Esta no nació exclusivamente por la experiencia con el duartismo, sino por décadas de gobiernos del PRI y del PAN que una y mil veces traicionaron la confianza de los chihuahuenses. 

Revivo el tema del despojo y saqueo que han sufrido este Pueblo, así como de la confianza hacia las administraciones de todo nivel porque hoy, de nueva cuenta, Chihuahua atraviesa por una situación que coloca a parte de su población, sobre todo al sector agrícola, ante la posibilidad de confiar (o no) en sus autoridades respecto al cumplimiento del Tratado de Aguas de 1944, firmado con los Estados Unidos. 

La situación ahora es distinta porque se cuenta con un Gobierno Federal del y para el Pueblo, con un Presidente que no traicionaría a los chihuahuenses y que sabe perfectamente que es necesario cumplir cabalmente con el tratado -que en lo general es benéfico para nuestro país como lo ha confirmado el mismo gobernador Javier Corral. 

Es difícil, y hasta cierto punto comprensible, que la sociedad chihuahuense -acostumbrada a luchar y resistir a los peores gobiernos del régimen pasado- confíe sin más, sobre todo en un tema tan importante como el agua, en las autoridades. 

Es verdad que ha existido un intento de manipulación por parte de algunos malos políticos de la región, quienes buscan aprovechar el momento para salir a la luz y de pasada golpetear al Gobierno Federal y a nuestro Presidente. Sin embargo, sería injusto generalizar ya que dentro de este sector, importante para el estado, se encuentran honestas trabajadoras y trabajadores del campo que durante años se han mantenido movilizados, colaborando con las mejores causas del Pueblo y que ahora miran con desconfianza cualquier acción que pueda representar un riesgo para su propia subsistencia.

En casi dos años de poner en marcha la Cuarta Transformación, no se ha traicionado la confianza de la ciudadanía ni se ha actuado en su contra, por eso se hace indispensable dar un voto de confianza a las autoridades federales y al Presidente Andrés Manuel López Obrador, que han garantizado que se contará con el agua necesaria para el riego y a la vez se cumplirá con el Tratado de 1944, respetando también con el compromiso con el gobierno estadounidense.

Los tiempos han cambiado. Como nunca lo habíamos visto, ahora contamos con el Gobierno de México que nos representa fielmente y garantizará lo mejor para nuestra sociedad. 

El agua, elemento primordial para la vida, será cuidada por la autoridad y por la gente en conjunto. Se acabarán los huachicoleros del vital líquido, quienes abundan en nuestro estado para que se brinde el suministro de manera general y utilizando la frase propiedad del corrupto: Que el cielo bendiga a Chihuahua con lluvias para esta temporada.

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