He empezado esta nota unas ocho veces, y en todas borro y vuelvo a borrar lo escrito, pues mi pluma no ha sabido ser fiel a mis pensamientos.
Todo empezó con una carcajada ante una noticia que supuse, era un meme: El IECM prohibió a candidatos de Morena y un par de medios de información hablar sobre el Cártel Inmobiliario.
Me reí, en verdad; supuse que era un meme.
De la risa, pasé al estupor y del estupor al coraje. «¿Qué se creen estos tipejos del IECM?», pensé en un primer momento, «¿Es que acaso no conocen el artículo 6º de nuestra Constitución?».
¿Piensan que somos tontos, o se quieren pasar de tontos, o se quieren pasar de listos?
De vuelta al inicio, he empezado esta nota unas ocho veces… y del coraje he pasado a la reflexión.
Claro que conocen la Constitución en el IECM.
Claro que conocen los tratados nacionales e internacionales de derechos humanos que garantizan la libertad de expresión y la libertad de prensa.
Claro que saben que lo que están haciendo es una arbitrariedad.
‘Lo saben, y aún así no les importa y toman partido por una de las partes!
Fuera máscaras.
En esta elección se lucha contra una derecha virulenta y sin proyecto encabezada por la señora Gálvez en lo federal y por el hampón Taboada en la Ciudad de México, pero también en contra del árbitro electoral.
Ya lo sabíamos, pero al menos pretendían estar guardando las formas. Ya olvidaron el viejo adagio de que «En política, la forma es fondo».
¿Prohibirle a un medio de comunicación hablar sobre el Cártel Inmobiliario?
¿Que ese medio de comunicación sea precisamente donde semana tras semana trato de enviar una colaboración?
Pues la verdad es que me llena de orgullo.
De la risa, pasé al estupor, del estupor al coraje, del coraje a la reflexión y hoy, de la reflexión al orgullo.
A toda la derecha virulenta y sin proyecto; a las autoridades electorales que pretenden censurar a medios y personajes; a todos los que quieren volver al pasado de corrupción y privilegios, a todos ustedes les digo desde este humilde espacio:
¡Es un honor estar con Obrador! ¡Es un honor estar con Claudia Sheinbaum hoy! ¡Es un honor estar con Clara Brugada hoy! ¡Es un honor estar con Gaby Osorio en Tlalpan! Y ¡es un honor colaborar en El Soberano, medio al que pretenden censurar!
Y desde acá les digo, con orgullo y convencimiento: no nos van a callar.
Nos vemos el día de la elección.