A finales de octubre de 2022, tres de las cuatro empresas que controlan el transporte público concesionado en la ciudad de Oaxaca decidieron aumentar de manera unilateral el costo del pasaje para los usuarios, es decir, sin la autorización del gobierno.

Durante tres días, estas tres empresas -dos de ellas representadas por la empresaria transportista Alejandra Gómez Candiani-, incrementaron de 8 a 10 pesos el costo de la tarifa, pese a la inconformidad y rechazo general de la ciudadanía que utilizan este sistema de transporte diariamente para ir a sus trabajos, a la escuela o para actividades cotidianas.

La medida arbitraria tomada por los empresarios del transporte público en la capital del estado tuvo la intención de imponer por la fuerza un nuevo costo del pasaje; sin embargo, tuvieron que retractarse ante la negativa de las autoridades, pues los operativos contra los operadores que cobraron los 10 pesos, incluso bajo la advertencia de la autoridad no sólo de imponer multas y hasta retirar la concesión. Finalmente, la tarifa regresó a ocho pesos.

Sin embargo, esta medida que por al menos tres días puso en jaque a la economía de los oaxaqueños, dejó en claro que los transportistas o concesionarios del transporte público urbano, buscan un nuevo aumento sin cumplir los acuerdos pactados con el gobierno del estado para mejorar no sólo las condiciones de los camiones, sino también la calidad del servicio.

En el año 2018, el gobierno de Oaxaca autorizó a los empresarios el incremento de la tarifa en el costo del pasaje a ocho pesos. A cambio, los empresarios se comprometieron a renovar sus unidades o camiones con lo que prestan el servicio; ninguno de los tres empresarios que representan a las cuatro empresas: Alejandra Gómez Candiani, Erasmo Medina Ángeles y Victoria Margarita Villanueva López, cumplieron con este compromiso.

Tampoco han mejorado la manera en que prestan sus servicios, pues también falta la capacitación de los chóferes además que los mantienen en pésimas condiciones laborales que los obligan a cumplir jornadas de trabajo abusivas.

Actualmente, el 83 por ciento de las unidades o camiones que prestan el servicio a través de estas cuatro empresas, son modelos no permitidos; es decir, son modelos de unidades anteriores al año 2012. Esto, en comparación con el 27 por ciento de modelos no permitidos entre las unidades del transporte público en modalidad individual de taxi.

Además, los empresarios han recurrido tramposamente a un modelo de negocios individualizado a través de la renta de placas a personas ajenas a la empresa y del cobro de cuenta diaria a los conductores de las unidades.

Mientras que los recurrentes incidentes y accidentes viales provocados por los chóferes de estos camiones son el resultado de la falta de profesionalización en el reclutamiento, además de las condiciones de las unidades por ello, el gran rechazo de la ciudadanía y de los usuarios a la prestación del servicio en varias zonas de la ciudad de Oaxaca.

En la capital del estado son cuatro los concesionarios que constituyen el mismo número de empresas para la prestación del servicio de transporte público colectivo a través de camiones urbanos. Estas empresas tienen registradas como unidades activas a 945 camiones, de los cuales 787 son modelos no permitidos (anteriores al año 2012) y sólo 158 son modelos permitidos. A esto se suma que, del total de unidades activas, únicamente 346 están en circulación.

Por número de unidades está Transportes Urbanos de la Ciudad de Oaxaca S. A. de C. V. representada por Alejandra Gómez Candiani, la cual tiene 306 unidades activas y de las cuales únicamente 97 están en circulación. De los 306 camiones, 271 son modelos no permitidos y 35 son modelos permitidos.

Esta empresa cuenta con 20 socios, pero los principales son María del Carmen Gómez Candiani, Carlos Leal Sosa, Ivonne Gómez Candiani, Silvia Martínez Ortega y Alejandra Gómez Candiani. Sin embargo, son además 150 los prestadores de servicio; es decir, personas que rentan placas a la empresa.

La segunda es la Empresa de Transportes Urbanos y Suburbanos Guelatao S. A. de C. V., representada por María Silvia Martínez Ortega y Erasmo Medina Ángeles. Ésta tiene 291 unidades activas, pero en circulación únicamente 93; de su parque vehicular, 239 son modelos no permitidos y 52 son modelos permitidos.

Aquí son ocho los socios y entre ellos destacan María Silvia Martínez Ortega, Erasmo Medina Ángeles, Álvaro Medina Félix, Filiberto Martínez Ortega, Manuel Ricárdez Velázquez y Jorge Pedro Infanzón. Destaca que adicionalmente son 100 los prestadores de servicios, es decir, personas que rentan placas a la empresa.

A esta empresa le sigue la Sociedad Cooperativa de Transportes Choferes del Sur S. R. L., también bajo la representación de Alejandra Gómez Candiani, con un total de 252 unidades activas, pero sólo 104 activas; 206 de sus camiones son modelos no permitidos y sólo 46 son modelos permitidos.

En Choferes del Sur son 20 los socios, entre los que destacan María del Carmen Gómez Candiani, Carlos Leal Sosa, Ivonne Gómez Candiani, Silvia Martínez Ortega y Alejandra Gómez Candiani; pero, tienen otros 150 prestadores de servicios, personas que rentan placas a la empresa.

Finalmente, se encuentra Servicio de Transportación Exprés de Antequera S. A. de C. V., mejor conocida como Sertexa que está representada por Victoria Margarita Villanueva López, con un total de 96 unidades activas, pero sólo 52 en circulación. De esta empresa, 71 de sus camiones son modelos no permitidos y 25 unidades son modelos no permitidos.

En esta última son tres los socios: Alejandro Villanueva López, Moisés Villanueva López y Victoria Margarita Villanueva; pero 50 prestadores de servicio que rentan placas a la empresa.

A excepción de la Empresa de Transportes Urbanos y Suburbanos Guelatao S. A. de C. V., el resto incrementó de manera arbitraria el costo del pasaje de 8 a 10 pesos.

Oaxaca está entre las cuatro ciudades del país con el mayor costo en la tarifa del pasaje. En primer lugar está Monterrey, Nuevo León, donde cuesta 15 pesos; le siguen Acapulco, Guerrero con 10 pesos; mientras que Villahermosa, Tabasco con 9.50 pesos y Oaxaca de Juárez, Oaxaca, con 8 pesos. Pero a diferencia de Monterrey, Nuevo León que tiene un PIB per cápita de 248 mil 248 pesos y ocupa el tercer lugar en el país, en la capital oaxaqueña es de 61 mil 305 pesos y ocupa el lugar 31 de las 32 principales ciudades de México.