Petróleos Mexicanos (Pemex) anunció que prevé generar un ahorro de aproximadamente 250 millones de dólares entre 2025 y 2026 gracias a una reorganización institucional aprobada recientemente por su consejo de administración, como parte de una reforma energética orientada a mejorar la eficiencia operativa de la empresa estatal.
La medida llega en un contexto complejo para Pemex, que enfrenta una deuda financiera superior a los 101 mil millones de dólares, además de pasivos por más de 20 mil millones de dólares con proveedores, mientras su producción de crudo mantiene una tendencia a la baja.
De acuerdo con un comunicado oficial, la reestructuración busca “fortalecer la cadena de valor, eliminar duplicidades en funciones y plazas, redirigir recursos hacia actividades operativas sustantivas y optimizar el gasto público”. Para lograrlo, Pemex ha comenzado a reducir estructuras administrativas, especialmente en áreas como comercialización, planeación, capital humano, contratación de servicios y análisis de costos.
La empresa destacó que estas acciones permitirán un ahorro de alrededor de 3 mil 532 millones de pesos en 2025 y otros mil 266 millones en 2026. Estas cifras representan 9.41% y 12.78%, respectivamente, del presupuesto autorizado para plazas de confianza permanentes.
Como parte del proceso de ajuste, Pemex implementó desde diciembre de 2024 un esquema de control de ingresos, limitando nuevas contrataciones de personal de confianza para mitigar los impactos de eventuales liquidaciones. La estatal aseguró que las bajas laborales previstas representan menos del 1.4% de sus plazas de confianza permanentes.
La reorganización fue avalada por el consejo de administración en su sesión del pasado 22 de mayo, en la que también se ratificó a Ángel Cid Munguía como director general de Pemex Exploración y Producción, cargo clave para las operaciones estratégicas de la empresa.
Este nuevo esquema de reordenamiento busca aliviar presiones financieras internas y mejorar la rentabilidad de Pemex en un entorno global marcado por la transición energética y los retos de competitividad en el sector hidrocarburos.