El próximo año el país tendrá una jornada electoral sin precedentes. Por primera vez en la historia, los conservadores se agruparán en un bloque para defender los privilegios del antiguo régimen, mientras que Morena y los partidos del Obradorismo defenderán el gran proceso de transformación nacional que como país y sociedad hemos decidido democráticamente emprender.
Renovaremos toda la Cámara de Diputados y se eligirán 15 nuevas gubernaturas a lo largo y ancho de todo el país. En total, se competirán más de 21 mil encargos de elección popular, por primera vez bajo el paradigma de la Cuarta Transformación de México.
Hoy escribo para hacer una predicción: en 2021 México se pintará guinda y el Obradorismo continuará consolidándose como el movimiento social más importante en el último siglo en nuestro país. Lo creo así, pues Morena ha logrado renovar exitosamente su dirigencia nacional; hemos logrado iniciar el proceso interno de manera democrática, plural y transparente; seremos aliados de aquellos sectores que concuerden en transformar la vida pública: no robar, no mentir y no traicionar, y además contaremos con las y los mejores candidatos para ganar —siendo mesurado y extremadamente cauto— al menos 13 gubernaturas de las 15 que estarán en juego.
La Cuarta Transformación triunfará de manera apabullante de nuevo porque está normalizando el país. Esta devolviendo al Estado su rectoría sobre las cuestiones más fundamentales y está garantizando derechos donde nacen necesidades. La política social se ha ampliado de 6 millones de beneficiarios a poco más de 25 millones. Adicionalmente, se aumentó el salario mínimo como nunca de 88.36 pesos a 185.56 pesos para atender el agravio histórico y neoliberal de procurar una falsa competitividad y sacrificando el bienestar del Pueblo de México. Hoy se combate la corrupción de manera inédita desde la Unidad de Inteligencia Financiera y se pone primero en la política pública y legislativa a las y los más pobres de México.
La política exterior ha sido de excelencia. Se ha garantizado con una profunda actividad diplomática el abasto de la vacuna para todos los sectores poblacionales. Encima, hemos sorteado con profesionalismo nuestra relación bilateral con Estados Unidos, y se ha recuperado del liderazgo regional en América Latina con miras a la patria grande, donde nuestra Presidencia Pro Témpote de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños ha convertido al organismo en uno que incentiva la cooperación multilateral y propone soluciones integrales a los problemas regionales que tenemos. En pocas palabras, la Cuarta Transformación ha logrado ejercer una política exterior de principios constitucionales, donde con base en la no intervención y la solución pacífica de controversias, hemos mantenido una excelente relación con nuestro vecino del norte, al tiempo que recuperamos nuestro protagonismo latinoamericano.
México vive tiempos de cambio. Tiempos que dignifican la política como el más noble oficio pues es aquel que sirve a la patria, a la sociedad y que es el más alto honor civil de cualquier ciudadano.
Celebro que los conservadores por fin se agrupen en un gran frente amplio para defender sus intereses. Es natural que en toda transformación social exista polarización entre quienes queremos un México plural, incluyente, democrático y justo y quienes militaban en la corrupción. El PRI y el PAN han defendido tradicionalmente sus propios intereses anteponiéndolos a la voluntad popular y al pueblo mismo. Es sano que se quiten la máscara, pues nos permitirá con mayor efectividad diferenciarnos de todos aquellos que nunca más deben volver.
Por todo ello pronostico que en 2021 el Pueblo triunfará y volverá a dar su voto de confianza a la Cuarta Transformación, a la honradez y al Presidente Andrés Manuel López Obrador.
Pronostico que viviremos un tsunami guinda.
