Como se dice comúnmente, “el que calla otorga”, y así ha sido la respuesta de las y los panistas tras el juicio histórico contra Genaro García Luna, declarado culpable por cinco cargos en Estados Unidos.
El silencio y las maromas para lavarse las manos de los claros vínculos del ex secretario de seguridad del Gobierno de Felipe Calderón con el Partido Acción Nacional, han sido la generalidad tras la resolución de la Corte estadounidense. Y es que este silencio se puede interpretar como “sepulcral”, pues pone el último clavo en el ataúd político del PAN y sus pocas expectativas por convertirse en un contrincante digo para el Gobierno de la Transformación. Ahora la consigna de que el Gobierno panista de Felipe Calderón fue un “narco gobierno”, es más factible que nunca, las pruebas existen y el pueblo no es tonto.
Lo que en su momento, se vendió como el “cambio democrático en México”, con la alternancia fraudulenta en el poder en el año 2000, termino siendo una de las etapas más dolorosas, más sangrientas, para el pueblo mexicano. Esta etapa de inseguridad que nos marcó a toda una generación sigue hoy teniendo sus consecuencias, sin embargo, ya están cayendo los culpables y pronto deberán caer todos y todas.
Es indignante que personajes ligados a lo que fue el Gobierno de Calderón, hoy tengan expectativas de compartir por un cargo público, deberían de primero aclarar cuál fue su participación en ese estrategia fallida de seguridad de guerra contra el narcotráfico. Por ello, veremos en próximos días, como las y los panistas dan patadas de ahogado, algunos se atreverán a deslindarse desde la comodidad de sus hogares en el extranjero y muchos otros tomarán sus maletas para huir de la justicia.
Por el momento, mientras la justicia hace su trabajo, el pueblo mexicano tiene un gran poder en sus manos y es el de enterrar de la vida política a las y los integrantes de ese clan conservador llamado Partido Acción Nacional. La respuesta debe ser esa, ni un voto al conservadurismo, luchar por que el PAN pierda su registro, como ya lo planteó Morena, que Felipe Calderón y sus narco amigos sean juzgados, impulsar las políticas públicas por combatir las causas de la inseguridad y que siga la Transformación del país.